miércoles, 29 de diciembre de 2010

Cuando el que calla NO otorga (sobre juicios y demandas)




Cortita y al pie:

“De todas las reacciones posibles ante una injuria, la más hábil y económica es el silencio”

Yo no soy muy hábil, por algo elegí correr y no jugar al fútbol, pero si soy muy económico, y aunque tuve que pagar un abogado para responder ante un juzgado por una demanda presentada sin ningún tipo de pruebas, elegí el silencio y que la justicia se expidiera.

Pasaron varios meses, la justicia dio su veredicto, nadie me vino a pedir disculpas, pocos pidieron mi opinión o me preguntaron, pero sé que muchos hablaron del tema.

Ahora los que guardan silencio son aquellos iluminados que blandieron su dedo acusador en la dirección equivocada. No les guardo rencor, solo espero, sin mucha esperanza, que sepan tener la grandeza de reconocer su error.

Quienes me conocen verdaderamente saben cómo me comporto en todos los ámbitos de mi vida, ellos siempre confiaron en mí y les agradezco. A los otros, a quienes sin conocerme, o a quienes escuchando solo una campana del tema me juzgaron, los invito a poner su granito de arena para que todos nos respetemos.

Algún iluso estará por ahí respirando aliviado, sabiendo que él, siendo culpable, se la llevo de arriba, espero que por lo menos, el tiempo que yo perdí (y el abogado que pagué), sirva para que estos individuos sigan escondidos.

Solo somos unos tipos que corren, dediquémonos a eso, y no intentemos tener siempre la razón sin importar la integridad del otro.

Buen año para todos.

Tubino