A los locos que corremos...

Hace unos días leía un artículo que además lo publique en la página sobre Marco Olmo, un veterano italiano campeón del mundo de ultra trail, estos logros llegaron a sus 58 años y la verdad que me hizo reflexionar en muchos aspectos y encontré muchas similitudes con nuestro diario vivir y sentir.
En parte de sus relatos este italiano dice que en sus vidas pasadas fue campesino, luego camionero, después obrero, el correr hoy se ha convertido en su razón de vivir, es el modo que utiliza para rescatarse de un destino amargo…ese es básicamente parte del pensamiento de este hombre.
Cuántos de nosotros comenzamos a correr por diversas razones, en muchas de las notas que he realizado a lo largo de este año lo demuestran, muchos comenzaron para mantenerse bien físicamente…por salud…otro para liberar el estrés del día a día…otros por simple diversión, y así un sin fin de razones más que podemos encontrar del porque corremos, y en esa búsqueda que se genera nos vamos apasionando, vamos encontrando amigos…nuevos objetivos...nos imponemos metas, encontramos motivaciones que hacen que cada vez nos guste más y más y correr se transforma en algo básico y necesario.
Bien dice el gran Marciano Duran que estamos locos, y tiene mucho de razón en eso, porque solo nosotros, “Los Locos que Corremos” tenemos esa respuesta y los que no lo hacen no logran entender…salir a entrenar con frio, calor, con viento, bajo lluvia, no importa si es en un parque, una avenida, un camino vecinal, o donde sea…siempre que haya un espacio que podamos hacer nuestra actividad, lo que tanto nos gusta.
No entienden el porqué nos levantamos la gran mayoría de los domingos del año muy temprano y cuando muchas veces estamos saliendo con el bolsito armado con cara de felicidad para nuestro gran día, nos estamos cruzando con los noctámbulos que todavía están deambulando por la city, o simplemente aquellos que disfrutan dormir hasta mediodía y nos ven como unos locos…y cuando no hay carrera nos sentimos perdidos.

Sin duda que este mundillo de los corredores es difícil de entender, pero nosotros somos felices, disfrutamos y amamos nuestra “soledad” a la hora de salir a hacer ruta, es ese momento del día que tenemos para encontrarnos con nosotros mismos, para distendernos, para dejar el estrés de lado, para pensar…proyectar y porque no también soñar…nos hacemos nuestra auto consulta, nos preguntamos y también nos respondemos, resolvemos problemas…en fin ese espacio que es nuestro y solo nosotros sabemos disfrutar de él porque nos traslada a nuestro mundo.
También esa procesión, el antes de cada carrera, las cabalas, el apronte de la remeras, championes, medias, cada uno tiene sus manías, sus cábalas, también es parte de la ceremonia previo a la carrera.
Y esto sigue…cuantas veces nos cuestionamos “que carajo hago acá”, ¿o nunca les paso?... en lo personal me paso corriendo la Maratón de Montaña de Villa La Angostura, muchas veces me pregunte que hago acá, en el medio de las montañas corriendo, pero como parte de esta locura fueron solo unos segundos de reflexión en estado normal porque enseguida entra el estado de locura y sigue el disfrute…y por mas que las piernas no dan más, la cara se transforme, nuestra mente tiene un único objetivo, el de llegar, cruzar el arco y sentir esa satisfacción inexplicable que nos llena el alma, y muchas ocasiones alguna lagrima se derrama…porque nuestro objetivo se cumplió, y no importa el tiempo ni la posición, si fuimos los primeros o con los que la moto de transito cerro el circuito, lo importante es que nos sentimos únicos, satisfechos, porque una vez mas nos volvimos a demostrar a nosotros mismos que si se puede, como dice Marciano queremos ganarle a la vida, es algo que solo quienes los viven sabrán entender, y es hermoso tener esa satisfacción de sentir que pudimos hacerlo.
En lo personal me siento Corredor…he encontrado mi estilo de vida a través del deporte, es lo que me mantiene con la mente y los objetivos claros, es un lugar donde logré hacer grandes amigos y compañeros de ruta, donde compartimos el mismo interés, que es disfrutar de esta locura y sentirnos ganadores cada vez que cruzamos ese bendito arco…y como sin pensarlo mientras seguimos jadeando y recuperándonos del esfuerzo y con en vasito de agua en mano estamos pensando en la carrera que viene.
Por eso entiendo muchas de las reflexiones de este italiano porque en muchos puntos coincidimos, nos separan miles de kilómetros de distancia, pero el espíritu, la fuerza y las ganas de los corredores…las sensaciones…las vivencias…el disfrute…es exactamente el mismo.
Este señor es una leyenda viviente del ultra trail, yo un simple corredor que ama y es feliz corriendo.
Salu!!Corredores.
Nos vemos en la ruta.

Raimundo Gonzalez Laguzzi.

Foto y saludos...Patagonia Eventos