El director de la Maratón de Reyes explicó que fue lo que sucedió en el accidentado final de la competencia.
Enrique Cresto: "Yo me he esforzado para que el rédito político de este evento lo tenga el intendente" El ex diputado provincial Enrique Cresto explicó a DIARIOJUNIO cual fue el origen de los problemas que, en parte, empañaron la finalización de la tradicional Maratón de Reyes. Luego de las declaraciones del Director de Deportes de la Municipalidad, Cresto, en su carácter de Director de la prueba atlética, aseguró que "como hombre de la política, sé lo que es un hecho político y creo que este es el hecho político mas importante que ha tenido esta (flamante) gestión" de Gustavo Bordet. Afirmando que "me he esforzado en lo personal para que el rédito político de este evento lo tenga el intendente. Ni cuando mi padre era intendente hicimos la conferencia de prensa en el municipio, y ahora fue por una idea mía". También detalló que el balance económica de la organización terminó "con un déficit de 7 u 8 mil pesos, que personalmente tuve que afrontar de mi bolsillo".
|
A la hora de marcar los avances de un tiempo a esta parte, Enrique Cresto señala que hace unos años "no había reloj electrónico, no había equipo de audio y nos largaba un hombre subido a una tarima y con un megáfono. Si uno ve eso entiende que hubo un salto cualitativo. Un merito de la organización y todos los que estuvimos al frente".
En obvia alusión a las declaraciones del nuevo Director de Deportes de la comuna, Mario Legarreta, precisó que "la organización de la carrera de los menores (en la costanera) también fue organizada en parte por nosotros y si hay alguien que tiene un rédito de esa prueba son los profesores de Educación Física que la hacen posible todos los años".
Mayores
"Con respecto a la prueba de mayores, tan mal organizada no debe haber estado porque en todo momento estuvo el intendente, sus secretarios y el director de Deportes", siguió señalando Cresto.
Admitiendo que "fallaron dos cosas, el sistema de chip" y actitudes deshonestas de competidores que habrían corrido con chips de otros.
Con respecto al funcionamiento del dispositivo electrónico, aclaró que "es el mismo que se pone a prueba en San Fernando, en San Silvestre y en la (maratón) Niké. Pero lo que sucede es que en esos casos lo único que hacen es clasificar del 1 al 3000, sacando algunas generales. No hay premiaciones por categoría como hacemos nosotros, donde hay 20 o 30 categorías. La gente de los chips fue irresponsable al decirnos a nosotros que iba a tener al momento las categorías", cosa que finalmente no sucedió.
Ante ese inconveniente cuando se estaba procediendo a la entrega de los primeros premios, Cresto explica que "lo mas criterioso que vimos fue decir que al día siguiente íbamos a entregar los premios a los atletas locales, mientras que a los de afuera se los íbamos a mandar por correo. Como hacen muchas pruebas". Pero esto no fue aceptado por algunos competidores que autoritariamente optaron por servirse ellos mismo un trofeo.
"Luego, si un atleta le da su chip para que otro corra por él, y con ese tiempo se hace acreedor a un premio, esa ya depende de la honestidad del atleta", subrayó. A lo que sumó que "hubo un problema con una chica de aquí, porque el sistema no reconoció el chip" y no aparecía en el tercer lugar que genuinamente había logrado.
Resumen y balance
Según el director de la prueba, "mas allá de esto, después fue una maratón exitosa". Destacando allí que se trata de un emprendimiento "que tiene un costo final de $150.000, con $50.000 en premios, $22.000 en remeras, folletería, presentación, conferencias, internet. Hidratación, vehículos, fletes y teléfono. A esto hay que sumar 200 atletas de elite a los que hay que pagarles hotel y comida, tal como se estila en otros lugares".
En materia de números dijo que "este año, entre el aporte del gobierno provincial, la CTM y los privados se logró recaudar un montó que no cubrió todos los gastos, así que personalmente tuve que afrontar de mi bolsillo un déficit de 7 u 8 mil pesos". Argumentando que "me hice cargo, no sé si por capricho o una postura mía, de dar $50.000 pesos en premio y que esta sea la maratón mejor premiada de Sudamérica. Superando a las de San Luis, la de San Silvestre en San Pablo (Brasil) o la de San Fernando en Punta del Este (Uruguay)".
Destacando por último el caso del "chico que salió segundo (Jorge Cabrera), que provenía de Paraguay y que salió segundo, pero que vino a ganar la carrera, participa siempre de la maratón de reyes de Paraguay, pero la suspendieron una semana para que ese chico que viene ganado las 6 últimas ediciones pudiera ganar acá. Eso demuestra la importancia que a adquirido en Sudamérica esta maratón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario